La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, lamentó hoy en Aranda de Duero (Burgos) que el puente de agosto ha sido “especialmente negro” en las carreteras de Castilla y León, con cinco fallecidos, tres de ellos en Burgos, uno en León y otro en Segovia.
Durante la rueda de prensa de valoración de la última edición de Sonorama Ribera, la delegada del Gobierno hizo un balance sobre la operación especial de tráfico del 15 de agosto en las carreteras de la Comunidad. Barcones lamentó los cuatro siniestros que han tenido lugar en las carreteras de Castilla y León, en los que cinco personas “de muy corta edad”, perdieron la vida.
“Si comparamos los accidentes y personas que han perdido la vida con respecto al año pasado, las cifras no son tan dramáticas, dijo, a la vez que recordó que este puente es la “constatación de que no se puede bajar la guardia en ningún momento”.
Recordó así que durante este puente, más de un millón de personas han circulado por las carreteras de Castilla y León, e hizo un llamamiento a “tener todos los sentidos en la conducción y respetar las normas de seguridad vial”. Asimismo, señaló que durante los meses de junio y julio han “sacado de la carretera” a más de 1.100 positivos en alcoholemia y casi 1.100 en drogas. “Es algo que como sociedad no nos podemos permitir», concluyó.