La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) confirmó la condena impuesta por la Audiencia Provincial de León el pasado mes de enero a un berciano por un delito continuado de agresión sexual a una menor de edad, su sobrina, de una pena de once años de prisión y a la prohibición de acercarse a ella o comunicarse con ella durante catorce años.
Además, el tribunal le impuso una indemnización de 18.000 euros, las costas del proceso, la medida de libertad vigilada durante cinco años y la inhabilitación especial para cualquier actividad que conlleve contacto con menores durante 16 años. La sentencia puede recurrirse ante el Tribunal Supremo.
La defensa había solicitado en su día una sentencia absolutoria invocando la vulneración del derecho a la presunción de inocencia del acusado a no haberse practicado pruebas de cargo suficientes para acreditar su culpabilidad. El acusado, durante el juicio, negó los hechos y cuestionó la credibilidad de la versión de la víctima.