Intervenidos 76 kilogramos de níscalos recolectados irregularmente en un pinar de Burgos

El Seprona de la Guardia Civil y agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León, fruto de la colaboración y como resultado de las actuaciones llevadas a cabo de manera conjunta, intervinieron 76 kilogramos de níscalos recolectados de manera irregular por dos valencianos (padre e hijo) al superar el peso máximo autorizado por persona y que ha supuesto la confección de un acta denuncia.

Entre los cometidos que desempeña ambos colectivos, en cuanto al control del aprovechamiento micológico, se encuentra la vigilancia de los puntos de compra-venta, transportes sospechosos, la comprobación de autorización para la recolección, detección de grupos organizados o la confección de denuncias llegado el caso, si bien corresponde a la Guardia Civil la instrucción de diligencias y en especial ofrecer seguridad a las personas que realizan recolección ante posibles presiones.

Días atrás, agentes medioambientales y guardias civiles, en el desempeño de las funciones propias de vigilancia preventiva encomendadas, recelaron de la presencia de un vehículo estacionado en uno de estos parajes ubicado en un monte público no acotado y por tanto zona libre, obteniendo información de que sus ocupantes pudieran estar recogiendo setas de manera masiva, superando los máximos autorizados, fijados en 3 kilogramos por persona y día.

En la tarde de ayer jueves, 5 de noviembre, tanto el personal del Seprona como los agentes medioambientales que se encontraban en la zona, detectaban el vehículo sospechoso con indicios de que pudiera estar cargado de setas, por lo que decidieron intervenir conjuntamente y parar el vehículo, según informaron hoy fuentes del instituto armado.

El turismo fue interceptado en la carretera CL-633 cuando abandonaban el monte y estaba ocupado por dos personas, padre e hijo, residentes en la Comunidad Valenciana. Un somero registro permitió localizar 20 cajas repletas de níscalos repartidas entre el maletero y el habitáculo interior, sobre los asientos; al ser preguntados por el origen y titularidad de los mismos no pudieron demostrar su lícita procedencia.

Al sobrepasar la cantidad permitida, los 76 kilogramos de excedente fueron decomisados y entregados en el Ayuntamiento titular del terreno del que fueron extraídos. Se ha confeccionado un acta denuncia conforme al Decreto 31/2017 por el que se regula el Recurso Micológico Silvestre en Castilla y León, en concordancia con la Ley 3/2009 de Montes de Castilla y León.