La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, criticó este lunes que haya comunidades autónomas “que no están respetando el Estado de Derecho porque están tomando medidas contrarias al último real decreto de estado de alarma” aprobado por el Gobierno central, en referencia a la Junta de Castilla y León y a su decisión de adelantar el toque de queda a las 20 horas.
En una conferencia organizada por ‘El Economista’, Maroto dijo que las medidas sobre movilidad deben consensuarse en el seno del Consejo Interterritorial de Sanidad y el Gobierno ya ha dado “un marco importante a las comunidades para la toma de decisiones”, pero éstas deben adoptarse por acuerdo entre las administraciones.
“Pedimos que se consensue y que se dialogue en los ámbitos donde se tienen que tomar las decisiones, y que esto no se convierta en una batalla contra el Gobierno”, añadió. “El enemigo a combatir es la pandemia y el Gobierno lo que quiere es lealtad para tomar las decisiones tratando de conciliar la protección de la salud, que por supuesto es una de nuestras prioridades, con el menor daño económico y social a nuestras empresas y trabajadores”.
Despidos
Por otra parte, sobre la negociación de la prórroga de los ERTE, confió en que los agentes sociales volverán a alcanzar un acuerdo para mantener una medida que se mantendrá “el tiempo que haga falta”.
Maroto defendió que se mantenga la prohibición de los despidos a las empresas, y cree que aquí también existe “consenso”. “Se está haciendo un extraordinario esfuerzo por el Estado, con unos recursos muy importantes, para proteger el tejido empresarial y el empleo, y cuando volcamos tantos recursos públicos tiene que haber derechos y obligaciones, y el mantenimiento del empleo es cuanto menos una obligación y muchísimas empresas no ponen en duda de que este es un compromiso de país, no conseguiríamos nada si diseñamos una figura en la cual se pudiera despedir con libertad”, sostuvo la ministra.
En relación con el precio de la luz, señaló que el Gobierno ha rebajado la factura en los dos últimos años un 40% “y seguiremos trabajando en ello, porque el precio de la energía nos preocupa y nos debe ocupar”, pero en este tiempo “hemos reforzado el apoyo a los consumidores más vulnerables” y el compromiso del Ejecutivo en este terreno es “indiscutible”.
Sobre la decisión de congelar el Salario Mínimo este año, señaló que “no se daban las condiciones” para subirlo y el Gobierno ha optado por no elevarlo “en un ejercicio de responsabilidad”, pero se hará en cuanto se den esas condiciones, “porque está en nuestro proyecto de gobierno ir recuperando los derechos laborales y uno de ellos tiene que ver con la precariedad”.